Washington, EE.UU. – El presidente Donald Trump confirmó que no habrá excepciones para Argentina en la aplicación de aranceles del 25% a las importaciones de aluminio y acero a Estados Unidos, medida que impactará exportaciones anuales superiores a 600 millones de dólares.
Impacto en el comercio bilateral
Argentina finalizó 2024 con un saldo comercial positivo de 229 millones de dólares en su intercambio de bienes con EE.UU., según datos del INDEC. Sin embargo, históricamente ha registrado déficit en la balanza comercial con el país norteamericano.
Durante las últimas dos décadas, Argentina exportó en promedio 3.289 millones de dólares anuales en aluminio, hierro, acero y sus manufacturas, de los cuales el 21% tenía como destino EE.UU. Esta medida afectará a empresas clave del sector, como Aluar y Tenaris, que dependen en gran parte del mercado estadounidense.
“Tenemos un poco de déficit con Argentina, como con casi todos los países”, expresó Trump al ser consultado sobre una posible exención. El expresidente mencionó que Australia podría ser la única excepción, debido a su alto nivel de compra de aviones estadounidenses y su superávit comercial con EE.UU.
Antecedentes y respuesta del Gobierno argentino
Esta no es la primera vez que EE.UU. impone restricciones a las importaciones de acero y aluminio desde Argentina. En 2018, durante la primera administración de Trump, se establecieron aranceles similares, aunque el gobierno de Mauricio Macri logró una exención parcial mediante un acuerdo comercial. No obstante, en 2019, el expresidente restableció las restricciones sin previo aviso.
En el gobierno de Javier Milei, se analizan estrategias para negociar una flexibilización de la medida y mitigar su impacto en la industria local. Especialistas advierten que, además de afectar el ingreso de divisas, la medida podría profundizar la crisis en el sector siderúrgico, que ya sufrió una contracción del 22,6% en 2024.
La imposición de estos aranceles representa un nuevo desafío en la relación comercial entre Argentina y Estados Unidos, y deja en incertidumbre el futuro de las exportaciones argentinas en estos sectores estratégicos.