El ambiente político está sobre cargado de hechos de diversa naturaleza, algunos de los cuales son los siguientes:
Ell grupo que dentro del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) adversa a Miguel Vargas Maldonado -encabezado entre otros por Rafael Vásquez (Fiquito) y Julio Maríñez- se encamina a suscribir apoyo al Partido Revolucionario Moderno (PRM) y a su candidato, Luis Abinader.
Quinientos simpatizantes de todo el país de ese sector levantisco del PRD se reunieron masivamente, hace poco, en el Club de Mayoristas de la avenida 27 de Febrero, en el centro de la capital dominicana.
Otro grupo que está a punto de pactar con el PRM y Abinader es el que integra el Partido Renovador Reformista (PRR), liderado, entre otros, por Héctor Rodríguez Pimentel y Osiris de León.
Al no poder obtener reconocimiento legal de la Junta Central Electoral (JCE), el PRR comunicó hace algunos días que seguirá teniendo presencia pública y acudirá al próximo certamen electoral “aliado a otras fuerzas políticas en los diferentes niveles de elección, siempre tomando en cuenta el interés del país y de la membresía”.
El principal promotor del PRR, Rodríguez Pimentel, fue funcionario de los dos últimos gobiernos de Leonel Fernández, líder de Fuerza del Pueblo, pero aparentemente ya no tienen vínculos.
Mientras tanto, se pregunta la población: y qué de la franquicia oficial reformista, es decir el disminuido Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) y su presidente, Federico Antún Batlle? No se sienten ni se percibe ningún activismo.
Pero hace pocos días el vicepresidente, Máximo Castro Silverio, dijo públicamente que el PRSC “trabaja su fortalecimiento en todo el país y hace aprestos para formalizar una alianza electoral con el Partido Revolucionario Moderno (PRM)”.