En octubre del año 2016, viajó a la República Popular China, la primera comisión de mujeres periodistas de República Dominicana, en un recorrido que abarcó a Beijing o Pekín, la capital; y a Shangai, principal ciudad metropolitana, considerada el corazón financiero de esa gran nación del continente asiático.
Realizaba la tesis “Relaciones Diplomáticas y Comerciales entre las Repúblicas Dominicana y la Popular China: Importancia, retos y oportunidades”, presentada, junto al abogado y dilecto compañero de estudios, José Manuel Difó, con la cual culminamos la Maestría de Diplomacia y Derecho Internacional, y que nos permitió acercarnos a distintos contactos, en la búsqueda de datos e informaciones.
Las entonces representantes de la Oficina de Desarrollo Comercial de República Dominicana, en China, Rosa NG Báez, y su homóloga de la República Popular China, en el país, Fu Xinrong, habían proyectado materializar una disposición del Gobierno chino de invitar a periodistas a visitar esa nación.
Pronto se formó el grupo, que se convirtió en el primero de mujeres de esa profesión, procedente de República Dominicana, que fue recibido oficialmente en la República Popular China.
Por allí estuvimos, la Premio Nacional de Periodismo 2015, Margarita Cordero; Edith Febles, Rosa Alcántara, Elsa Peña, Petra Rondón, Doris Pantaleón, Miosotis Grullón, Andreis Chalas, y quien suscribe, en jornadas de trabajo que incluyó encuentros con autoridades, empresarios, visitas a lugares históricos, culturales y de trabajo social, así como a la Televisión Central de China (CCTV), y degustaciones de platos típicos, entre otros atractivos.
Siete años después, recuerdo el viaje a propósito de la XIX Reunión del Consejo Regional de Planificación del Instituto Latinoamericano y del Caribe de Planificación Económica y Social (ILPES) de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), que se realizará en el país, del 7 al 9 de noviembre.
En este encuentro internacional, ministros, viceministros y otras autoridades de la región, así como representantes de organizaciones no gubernamentales y de organismos de las Naciones Unidas analizarán los avances y los desafíos de la planificación para el desarrollo de América Latina y el Caribe. ¡Necesario y oportuno!
El programa establece que la CEPAL presentará el documento de posición “Prospectiva para el desarrollo: aportes para una gobernanza territorial con mirada de futuro”, que busca instalar una reflexión en torno a la planificación y la prospectiva, para la institucionalización de esas prácticas en el aparato estatal.
Planear y planificar son dos verbos, cuyas acciones son habitualmente escasas por esta región y, particularmente, por nuestra República Dominicana, a tal punto que, incluso, cuando hemos tratado de darle cabida, el proceso ha resultado infructuoso.
Shanghái es una de las principales ciudades de China, con una población superior a los 26 millones de personas. Posee una exorbitante belleza urbana y artística que la hacen merecedora de los más altos reconocimientos y, créanme, todo ha sido bajo el espíritu de la planeación y la planificación estratégicas.
En nuestro viaje, fuimos testigos de excepción tanto de la planificación existente, como de la planeación que poseen para el futuro.
Tuvimos la oportunidad de ver la Shangai de hoy y la Shangai que los shanghaianos quieren tener en el año 2050, con todo previsto:
Crecimiento poblacional, demanda inmobiliaria, de los servicios, tipos de habitad que necesitarán, volumen de plantas naturales que requerirán para la oxigenación de los espacios, servicios básicos, cantidad de vehículos que estarían transitando, semáforos para la regulación de la movilidad, el tipo de movilidad que tendrán, los perímetros culturales de los que dispondrán, en fin…
No exijo que los ordenamientos y previsiones que se llevan a cabo en Shangai, se produzcan ahora en República Dominicana, donde, todavía, una institución asfalta una calle y al otro día otra va y cava un pozo, un hoyo o cualquier otra cosa que implique destruir lo arreglado, sin más ni más, sin ton ni son, sin que ni siquiera medie la comunicación.
Ojalá que, en el encuentro regional coordinado por la CEPAL, los protagonistas y asistentes logren acercarse al ideal de ver las ventajas que arroja la existencia de “una gobernanza territorial con mirada de futuro”, no sólo como materia prima para el arsenal teórico del que se dispone, sino como líneas de trabajo a corto, mediano y largo plazo.
Ya es tiempo de que sean adoptadas acciones que hagan arrinconar el espanto urbano. El país puede dar pasos certeros hacia el ordenamiento, en todos los sentidos, pero hay que ponerse a hacerlo. Está dicho, planear, planificar, ejecutar y supervisar son verbos de acción entrelazados para el desarrollo.